Monday, October 24, 2005

¿Por que fracasan los Matrimonios?

LA SUEGRA
Virginia sirvió la cena a su marido y a su suegra, que como siempre había caído de sorpresa ese día. La suegra probó la sopa y dijo: "A esto le falta sal". Antes de que terminara la sopa, hizo otra observación: "¿Tu mamá no te enseñó que los fideos se fríen antes de hacer la sopa?". Cuando Virginia sirvió el pollo, su suegra comentó: "Se te pasó la mano Virginia, lo hubieras dejado un poco menos en el horno". Al momento del café, la suegra dijo: "¿Por qué le sirves el café tan cargado a mi hijo?. No es bueno para su salud"... La suegra y su marido fueron a tomar el café a la sala, mientras que ella se fue a lavar los platos. No pasaron cinco minutos, cuando la señora asomó la cabeza por la puerta de la cocina, "Virginia, las camisas de mi hijo no están bien planchadas. Cuando vivía conmigo, hasta se las almidonaba y todo, ahora parece un indigente el pobre...
Virginia se estuvo tragando su furia todo el tiempo, pero cuando estuvo sola en su habitación , con su marido, ya no pudo más, siempre era lo mismo con su suegra y él no decía nada. "Estoy harta de que tu madre siempre llegue sin avisar y se entrometa en nuestras vidas. Siempre critíca lo que hago, nunca se le da gusto con nada, tienes que ponerle un hasta aquí. Yo me casé contigo, no con mi suegra. ¡Llevamos solo tres meses de casados y ella aparece aquí casi todos los días!". Su marido se quedó pensativo por unos momentos y no dijo nada. Virginia lo increpó nuevamente y se armó la discusión. No llegaron a ningún acuerdo y las cosas siguieron igual. Hasta que un día, Virginia se armó de valor y le dijo a su marido: ¡"Tu mamá o yo!".



"Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su esposa y los dos serán como una sola persona" (Efesios 5:31)
Cuando una pareja decide unirse en matrimonio, ambos deben estar conscientes de que formarán una familia, en donde habrá una cabeza, que es el marido y su ayuda idónea, que es la mujer. Nadie más deberá intervenir en la manera como llevarán su vida y su hogar. El matrimonio, ante todo necesita comunicación y privacidad. Es una imprudencia que la suegra o el suegro se presenten de improviso constantemente. No quiere decir que nunca vayan a visitarlos, pero siempre debe ser con previo aviso. La suegra nunca debe criticar a la nuera por algo que hizo o no hizo. Si acaso un consejo, una sugerencia, pero en el momento oportuno y en buen tono, pero no con frecuencia. La suegra nunca debe tratar de cambiar las costumbres de la nuera ni cambiar objetos de lugar, ni ponerse a limpiar sin que nadie se lo pida, etc.. Puede que lo haga con buena intención, pero es molesto para la nuera.
El esposo debe dar su lugar a la esposa siempre, aún delante de su madre. Hay hombres que por no contrariar a su madre, la dejan que tome un papel que no le corresponde en su hogar, sin darse cuenta de que están provocando fricción entre su esposa y su madre. El esposo no debe dejar que nadie ni nada, afecte la tranquilidad de su matrimonio. Debe hablar con su madre y hacerle entender que ahora es su esposa la que se encarga de él y la que decide cómo llevar el hogar.
Si tiene roces con la suegra, sin que el marido se dé cuenta, la esposa debe hablar con él y exponerle los hechos, sin ser ofensiva al referirse a su madre. Si no hay respuesta de parte de él, porque no quiere hacer sentir mal a su madre, entonces la esposa deberá buscar un momento especial para hablar con ella.
Nada mejor que poner los puntos sobre las íes desde el principio, pero si esto no se hizo y en el transcurso de los días, semanas y meses, la suegra se mete cada vez más en lo que no le importa y le hace la vida imposible a la nuera, sin que el hijo diga ni haga nada, la nuera debe tomar cartas en el asunto. Nada es más importante que su matrimonio y si hay que hablar, hay que hablar. La cuestión es saber hacerlo. Antes que nada, la nuera debe tratar de comprender el por qué su suegra actúa así. La comprensión suaviza las cosas y si hay comprensión , también debe haber perdón. En este plan debe estar la nuera cuando hable con su suegra. Si se decide a hablar con ella, solo para herirla y desquitarse de lo que le ha hecho, todo empeorará. Si hay comprensión y perdón, la plática podrá ser amable y la suegra también tendrá que comprender a la nuera. Dentro de cada suegra de esas denominadas "ogros", también hay un corazón. Una buena relación con la suegra, no depende solo de ella, se necesita también la buena voluntad de la nuera. Debe intentarlo cuantas veces sea necesario, por su propio bienestar y el de su matrimonio. Requerirá de paciencia, tiempo, y sobretodo amor, de parte de la nuera, pero valdrá la pena.