DERECHOS DE AUTOR

Cuando un escritor, un compositor o un artista patentan sus obras, significa que solo ellos tienen derecho sobre sus obras. Nadie más puede hacer nada con ellas, sin permiso de los autores. Así mismo, existen derechos dentro de la sociedad, que a menudo no se respetan, pero existen: los derechos humanos, los derechos de los niños, los derechos de las mujeres, los derechos de los ancianos, los derechos de los animales inclusive. Pero muy pocos piensan en los derechos de Dios. El es el Autor de toda la naturaleza, pero nadie le pide permiso para destruirla. El es el Autor de la vida, sin embargo, muchos hacen con su vida lo que quieren, sin tomar en cuenta a Quién les dio esa vida. El es el Autor del cuerpo humano, mas, cuántos cuerpos humanos se destruyen en las guerras y en los crímenes que se cometen a diario por codicia, odio y maldad. Y cuántos se destruyen a causa de las drogas o el alcohol...
Mucha gente pregunta: ¿Por qué Dios permite todas esas cosas? El nos dio la vida para que la vivamos y dejemos vivir a los demás. Esa vida es solo prestada, El sigue siendo el dueño y nosotros solo tenemos la responsabilidad de cuidarla. Pero existen seres humanos que no respetan la vida ajena y acaban con ella. En esos casos Dios se duele, pero junto con la vida, El nos dio a todos por igual, un libre albedrío sobre el cual no interfiere. Mientras exista la maldad, siempre van a haber víctimas inocentes. Esto podría compararse al caso de un escritor que tramita su derecho de autor y después una editorial publica su obra. Cada una de esas publicaciones, pasa a manos ajenas, que puede que la cuiden o que la destruyan. Pero la obra original sigue perteneciendo al autor. Igualmente sucede con todas las obras de Dios. No somos dueños de nada en este mundo, porque todo proviene de El. La naturaleza, el universo es de El. Lo hecho por el hombre, es derivado de lo hecho por Dios. El hombre no puede obtener nada de la nada. La ciencia se jacta de muchas cosas, pero lo único que poseen los científicos es cierto conocimiento, más no los derechos de autor. Y también la mente humana es obra de Dios. Dios tiene los derechos de autor del universo entero.
¿Hasta cuándo seguiremos nosotros, los seres humanos pasando por encima de los derechos de Dios? Dentro de la sociedad, el no respetar los derechos establecidos, es motivo de penalización. Esto es por todos sabido, pero existe desgraciadamente la impunidad y la injusticia. Pero delante de Dios, ninguna falta queda impune, El obra con plena justicia. Este mundo nunca será lo que todos deseamos si no se comienza por respetar los derechos de Dios.
"De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan" Salmos 24:1
Angélica García Sch.