VENCIENDO AL ENEMIGO

Durante este mes de Abril se han recordado nuevamente algunos acontecimientos relacionados con la vida de nuestro Salvador Jesucristo, para cumplir la voluntad perfecta del Padre en Su plan de salvación para nuestras almas. Cuando leemos acerca de las acechanzas de Satanás en el desierto, cuando estaba el Hijo de Dios en ayuno de 40 días, saliendo Cristo como un gran vencedor, me pregunto si Satanás fue tan atrevido para presentarse ante el Hijo de Dios con tanta maldad y mentira, ¿Qué no hara contra nosotros, para que caigamos en sus artimañas tratando de quitarnos del Camino de la Verdad y la Vida?
La Palabra de Dios nos dice que él anda como león rugiente buscando a quien devorar y que vino para matar y destruir, por lo tanto debemos estar en todo tiempo bien protegidos y armados para salir victoriosos. ¿Cómo? Usando la armadura que Cristo nuestro Capitán nos señala por medio de uno de sus grandes soldados, el apóstol Pablo en su carta a los Efesios cap. 6:1-18
Cuando tenemos espiritualmente el cinturón de la verdad podremos vencer las mentiras de Satanás. La coraza de justicia es muy importante porque a menudo los ataques son hacia el corazón porque es el centro de nuestras emociones, autoestima, confianza. La aprobación de Dios es la coraza que nos protege y por medio de la sangre de nuestro Señor Jesucristo, recordándonos constantemente el Espíritu Santo que somos hijos del Dios Todopoderoso.
Teniendo bien puesto siempre el calzado que nos provee nuestro Dios para movilizarnos siendo aptos para promulgar las buenas noticias de salvación y paz
que están al alcance de todos aquellos que las crean y acepten, enrolando más soldados para el ejército del Reino. Siendo nuestra arma de defensa el escudo de la fe (o para nuestras nuevas generaciones "el chaleco antibalas") estando siempre protegidos por la mejor fortaleza, el ángel de Jehová que acampa alrededor nuestro y nos defiende. El Casco protector para que nuestra mente esté protegida contra los malos pensamientos y dudas que quiere sembrar en ella Satán. El quiere sobre todo que dudemos de la obra redentora y salvadora de nuestro Señor Jesucristo haciéndonos creer que hay "otros medios" para alcanzar el cielo. Pero la Palabra de Dios nos dice claramente: Yo soy la Resurrección y la Vida (Jn. 11:25), nadie viene al Padre si no es por Cristo, y que El vinó a salvar y buscar lo que se había perdido (Lc. 19:10).
Para hacer que huya el enemigo de nosotros y nos deje en paz tenemos que usar la mejor arma de combate que está a nuestro alcance, la Palabra de Dios, es la única arma ofensiva en esta lista de la armadura. Hay momentos en que tenemos que usarla contra las tentaciones que se nos presenten, porque el ejemplo perfecto nos fue dado por nuestro Señor Jesucristo, ya que El siempre contestó: "Como esta escrito" o "Escrito está" y Satán fue vencido y será vencido como lo señalan las Escrituras.
Y la recomendación es: orar en todo tiempo, por nosotros, nuestras familias, los pastores, obreros, misioneras, por el pueblo de Dios, para que sigamos avanzando como vencedores en la lucha contra el mal. Para que nuestra tierra sea sanada y vivamos en plenitud de gozo y paz.

Landy Q. de Ortiz