IDENTIDAD
Gran parte de los seres humanos, en la época de la adolescencia, buscan identificarse con alguna otra persona, un cantante de moda, una celebridad que les provoque admiración. Esto es porque no tienen una identidad bien definida aun y necesitan un modelo a quien copiar rasgos de personalidad. Pero, cuando tomamos la decisión de seguir a Cristo, no necesitamos buscar con quien identificarnos, más que con él. No necesitamos recurrir a nadie más. Jesús debe ser nuestro único ídolo y modelo a seguir. Debemos ser imitadores de Cristo.
Cuando nos sintamos confundidos en cuanto a cómo actuar o reaccionar ante alguna situación, solo tenemos que pensar en lo que haría Jesús. No tenemos por qué sufrir ningún problema de identidad si tenemos a Jesús. Si nos identificamos con él, adquiriremos seguridad, firmeza en nuestras decisiones, nuestro sí, será sí y nuestro no, será no. Para Jesús no hay medias tintas, para nosotros tampoco debe haberlas. Un hijo de Dios, debe ser una persona única y distinguirse entre los demás, pero no por la ropa que usa, ni por el arete en la lengua, ni por el peinado, ni por los zapatos, etc., no necesitamos nada de eso para demostrar que somos especiales, ni que somos valientes, ni que somos audaces. Que no sea lo exterior lo que hable por nosotros, hablemos nosotros mismos y seamos nosotros mismos.
La mayoría de los jóvenes y aun, muchos adultos, sufren una crisis de identidad hoy en día. Los medios de comunicación nos muestran una gama extensa de imágenes y personajes a seguir, que van contra los valores que hemos aprendido de nuestros padres o en la iglesia. Esto confunde a muchos, pero les parece bastante atractivo, dada la naturaleza rebelde del ser humano, sobretodo en la juventud, donde se hace atractivo todo lo prohibido. En esta etapa es donde los chicos se vuelven unos excelentes receptores de todo lo que la publicidad y el cine o la T.V. les ofrece. Hace algunos días, los noticieros hablaban de la aparición de lo último en la tecnología de juegos de video, el XBOX 360. Cientos de muchachitos se amanecieron esperando que abrieran la tienda donde venderían la primicia. Después de que abrieron, se amontonaron y hasta se pelearon para obtener "tan preciado tesoro". ¿Qué les lleva a actuar de esa manera?, ¿por qué esa necesidad imperiosa de obtener a toda costa lo que muchos otros también anhelan? La publicidad es un río de fuerte corriente, que arrastra con mucha facilidad a quienes buscan identificarse con otros, aunque sea persiguiendo un mismo fin. Los líderes e ídolos no son solo personas, en estos tiempos. Pueden ser personajes ficticios o puede ser la publicidad, o inclusive puede ser un deporte, pero siempre el hombre busca a quién o a qué seguir, para llenar ese vacío interior que los agobia. Con Jesús, ya no hay más búsqueda que realizar, él es el camino, él es la verdad, él es la vida, es la llenura, el gozo. Si nos identificamos con él, si lo imitamos a él, no debe existir ningún temor a equivocarnos. Nuestra búsqueda ha terminado. Todo lo demás se acaba, pero él perdurará por siempre.
"Amado, no imites lo malo, sino lo bueno.
El que hace lo bueno es de Dios; pero el que hace lo malo, no ha visto a Dios"
3 Juan 11
Angélica García Sch.
0 Comments:
Post a Comment
<< Home