Monday, November 06, 2006

PORTADA NOVIEMBRE - DICIEMBRE

LLAMANDO LA ATENCION DE DIOS




Pensando seriamente en un tema para este artículo, el Señor me llevó a recordar una reflexión que nos dieron a profesores y maestros del Instituto Canzión, no hace mucho. Se hablaba sobre personas que han llamado la atención de Dios. ¿Cómo es posible? ¿Se podrá llamar la atención del mismísimo Dios? Tal vez ustedes, amables lectores, también se hicieron estas preguntas, pero sí se puede lograr. Para "checar el dato", vayámonos a la Biblia y analicemos cuatro características comunes a estas personas que fueron capaces de llamar la atención del Alto y Sublime.
Primera: Eran gente común y corriente. Es más, eran más corrientes que nada. Para ilustrar esta característica tenemos al ciego de Jericó, en Lucas 18:35 al 43. Este ciego carecía aun de algo tan valioso como lo es el sentido de la vista. Era tan solo un pordiosero, sentado junto al camino. Marcos nos dice que se llamaba Bartimeo. Era bastante común y corriente y para colmo, limitado físicamente, pues en esos tiempos bíblicos se prestaba muy poca atención a los invidentes.
En la Biblia también se hace mención de una viuda muy pobre, que echó dos insignificantes monedas de cobre en el arca de las ofrendas. El ser viuda en la época bíblica era hablar de tristeza y desolación, como se menciona en Lamentaciones 1:1. Las viudas llevaban ropa especial, la cual hacía resaltar su viudez. Aunque la legislación hebrea las defendía, Jesús acusó a los escribas de quitarles sus casas a las viudas, en Marcos 12:40. En fin, esta viuda era una persona señalada y desprotegida.
La segunda característica de quienes lograron llamar la atención divina, es: No contaban con recursos económicos. Bartimeo, pedía dinero, la viuda dio todo lo que tenía, lo cual se reducía a dos monedas de diez centavos, de nuestros tiempos. Otro ejemplo podría ser la mujer que llevaba doce años padeciendo flujo de sangre, la cual había gastado en médicos todo lo que tenía, según se describe en Lucas 8:43-48. Se había quedado pobre y además estaba considerada inmunda, como estipula Levítico 15:25, a causa de su enfermedad. ¿Qué podía hacer esa mujer? Al parecer, era un caso perdido.
La tercera característica del tema en cuestión es: ¡Eran personas apasionadas! Tal vez te sorprenda esto, pero se necesitaba una pasión por Dios y por Jesucristo para atreverse a hacer lo que tal vez les costara la vida. Bartimeo le gritó al Maestro:" ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!" El gentío que precedía a Jesús le ordenó que se callara, pero no les hizo caso y siguió gritando. Cuando Jesús llegó a ese lugar, se detuvo y ordenó que le trajeran al ciego. ¡Jesús se detuvo! ¡Esto es maravilloso! Jesús nunca desatenderá el grito, el ruego de alguien que clama con todo su ser al Rey de Reyes. La viuda pobre sabía que iba a ser criticada y menospreciada a causa de su ofrenda tan pequeña, mas ella pasó por alto eso y dio su corazón junto con las monedas, sabiendo que Dios supliría todas sus necesidades. Viuda pobre, pero con una pasión por agradar a su Marido, con lo único que podía ofrecerle. La mujer del flujo de sangre tenía bien claro en su mente que el tratar de tocar el borde del manto de Jesús, podría acarrearle la muerte. Sin fuerzas y enferma, trataba de abrirse paso entre la multitud y además corría el peligro de ser apedreada por no haberse mantenido alejada de las personas, a causa de su enfermedad. Pero estos obstáculos no fueron un impedimento para la débil mujer y recibió estas dulces palabras de Jesús: "Hija- le dijo El- tu fe te ha salvado; ve en paz."
La última característica de estas personas tan especiales, es ésta: Le creyeron a Dios. Esto es claro y sencillo de entender. Si las personas que mencioné, que solo fueron algunas, de tantas que hay en los relatos bíblicos, no hubieran tenido fe en Dios y en Su Hijo Jesucristo, los milagros no se hubieran llevado a cabo, porque sin fe, es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6) Todos ellos le creyeron a Dios, tuvieron confianza en Su poder, amor y misericordia. Simplemente, creyeron en Dios, en Jesús.
Amigos(as), ustedes también pueden ser parte de las personas que son capaces de hacer que Jesús se detenga para oir su clamor, para atender su necesidad, para otorgarles sanidad. No piensen que ustedes no califican para atraer la atención de Dios. Si ustedes tienen estas pocas características, puede haber otras, pero si ustedes encajan en este patrón, ¡ya la hicieron! Nadie es tan común, tan corriente, tan pobre, ni está tan enfermo, como para que Dios no lo escuche. Sigamos orando con fe y veremos Sus incontables misericordias. ¡Ah! y si no tienen fe, pídansela a Jesús, su autor y consumador. ¡Bendiciones!

Judith Patiño

BUEN APETITO



Algo que a todos nos gusta, es comer, lamentablemente muchos, no sabemos hacerlo bien. Elegir el menú, la porción y hasta el horario para consumirlo, es importante. Los malos hábitos, comer por comer y darle duro a la comida “chatarra” afectan terriblemente nuestro cuerpo.
¿Sabías que el 90%, o más, de todo los padecimientos conocidos por la humanidad se deben a la malnutrición, por defecto o por exceso? Pues nuestro cuerpo debe recibir diariamente un determinado numero de componentes especiales, para mantenerlo saludable.
Hay un dicho muy conocido: “somos lo que comemos”, y si lo analizamos bien, ¡es cierto! Lo que comemos dicta nuestra salud, nuestro peso, nuestra apariencia, nuestro humor, nuestro vigor, etc. y en la elección de nuestra comida, se dejan ver nuestros gustos y hasta nuestros propósitos. Comer, no es un pecado, lo convertimos en pecado, cuando no comemos bien.
Hay quienes se cuidan demasiado, y se pierden la bendición de saborear los placeres de la comida; otros, están tan enfermos, que no pueden disfrutarla, no se les antoja. Una gran mayoría, abusa de la comida, pero hay gente, que tiene el gusto de comer para vivir, y como lo quiere hacer bien, come balanceado.
Nuestro cuerpo no solo se alimenta de pan, pues también el espíritu, necesita comer. “Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre”. Juan 6:27. Este versículo nos habla de 2 clases de comida que puede ingerir el hombre: una comida física para el cuerpo, lo cual perece, pues, debes reponerla y consumirla día tras día, y la comida espiritual que permanece para vida eterna. Y el único autorizado para dar esta comida espiritual es Cristo, quien dice: “Yo soy el pan de vida, el que a mi viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás”.
El enemigo tiene un gran menú, y ha hecho que el mundo pierda el control de su alimentación espiritual, pues se dejan llevar por el sabor, la variedad y el colorido, sin darse cuenta que es un alimento peligroso, que el placer es momentáneo y que su fin, será enfermedad y muerte espiritual.
¿De dónde te estás alimentando tú? Sabemos que el verdadero pan, el pan del cielo está en Jesucristo, pero saber no es suficiente, hay que comer y nutrirnos de Su Palabra. Cuanta gente tiene conocimiento de menús de nutrición excelentes; o cuando menos sabe lo que es provechoso comer y lo que no debe incluir en su dieta, pero sigue comiendo comida chatarra, aunque su cuerpo lo esté resintiendo.
Comer debe ser un placer, y hacerlo bien, debe ser mejor, porque no solo lo sentirás en el momento de comer, sino lo verás reflejado en toda tu vida. Jesucristo, es el mejor alimento, si ya lo aprobaste, querrás seguir alimentándote de El.
Escuchar la Palabra de Dios, debiera ser un deleite y una necesidad para nosotros, así como almorzar, comer y cenar, nuestra comida favorita. Recuerda, que cuando un alimento nos gusta, queremos comerlo a todas horas, y cuando no se nos apetece, es señal de que algo anda mal, estamos enfermos o con problemas. Las evidencias espirituales más notables, son: no querer escuchar la Palabra, por eso la distracción a la hora del sermón y la salida temprano de la iglesia, y la otra cosa, no leer la Biblia, a ninguna hora y en ningún lugar. La comida espiritual, no es aburrida, es variada, así como el pollo, la carne y el pescado, se pueden servir de muchas maneras, la Palabra de Dios es expuesta de diferentes maneras, por sus siervos y por los medios de comunicación.
Si has perdido el apetito por la Palabra de Dios; si por algún motivo, combinaste tu alimentación (el mundo y Dios), si te has desordenando al dejarte llevar por los atractivos platillos del diablo, quizás te cuesta trabajo reconocer que estás enfermo (en pecado), o desnutrido (sin conocimiento), porque no has puesto atención a las señales de alerta que tu mismo cuerpo trasmite, recapacita. También tu espíritu está sufriendo las consecuencias. Si quieres sentirte y verte bien, necesitas alimentarte bien, esto es de Cristo.

Marisa Valle

AMOR A LA IGLESIA

Hola, mi nombre es César M. Durán y nací en la hermosa ciudad de Piedras Negras Coahuila, hace poco mas de 36 años (septiembre 15, 1970).
Algo que cambió mi vida, ocurrió cuando tenia 6 años: Me enfermé de meningitis tuberculosa, y para aquellos años, con esa enfermedad fui desahuciado por los doctores. Mis padres estaban desconsolados con la noticia, pues yo era el hijo mayor y el nieto consentido. Una pareja cristiana a la que conocían, al enterarse del diagnóstico médico, le pidieron a mis padres que me ofrecieran a Dios, a fin de cuentas ¡iba a morir! Así fue como mi madre conoció a Cristo, y yo fui ofrecido a Dios.
Mis padres me sacaron del hospital y me llevaron a la casa para que muriera ahí, pero eso no ocurrió, Dios me sanó, y poco a poco me fui recuperando, hasta que regresé a la escuela; después de casi dos años de enfermedad, empecé a vivir como un niño normal.
Comenzamos a congregarnos en el Templo San Pablo, que era la iglesia de la pareja que nos habló de Dios y ese fue el lugar que Dios usó para transformar nuestras vidas. Mi niñez y adolescencia, las viví participando en las actividades de la iglesia, y fueron los años más hermosos de mi vida. Tuve la bendición de ser uno de los que formaron la liga de intermedios, a principios de los ochentas; de formar parte del Coro Maranatha, cuando era el coro de la liga de jóvenes. Dentro de la liga de intermedios empecé a servir a Dios, puedo decir que tuve todos los puestos de la mesa directiva; después formé parte de los gabinetes distritales de los intermedios y también, del de los jóvenes, y a la edad de 17 años, Dios me llamó al ministerio de tiempo completo.
Conforme crecía espiritualmente, le preguntaba a Dios ¿Por qué me sanaste? Lo hice tantas veces, hasta que en una ocasión, en el altar de la Iglesia, me respondió. Oí su voz literalmente, diciéndome: “Te sané para que me sirvas en la Obra del Ministerio”.
Después de resistirme un poco, pues no puedo negar que mis sueños ante la vida eran otros en aquel tiempo.

A los 17 años, dejé todo por el Señor, casa, familia, amigos y hasta mi iglesia, y puedo decirlo abiertamente, eso era mi vida, y aun me acuerdo de todo y lo llevo en el corazón, pero Su promesa de que iba frente mí y a donde quiera que fuera, hizo que no me resistiera más.
Dios me abrió las puertas del Seminario Metodista Juan Wesley en Monterrey N. L. a un a pesar de mi edad. Y ahora llevó 18 años en el ministerio de tiempo completo: 4 años estudiando en el Seminario y 14, en la Obra. He servido al Señor pastoreando varias congregaciones Metodistas en los estados de Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Sonora y desde 3 años, el Señor me trajo a la ciudad de Dallas, Tx.
Dios me ha recompensado grandemente. He visto Su presencia y Su bendición en cada una de las congregaciones en donde he estado. He aprendido quien es Dios y que desea de mi vida. Sigo teniendo sueños y metas, y lucho por conseguirlas con la ayuda de Dios, pero hay un deseo que espero El me permita realizar un día, y ese es: regresar a mi iglesia natal y vivir lo de aquellos años, sirviendo a Dios juntamente con ustedes, mi iglesia.

Siempre recordándolos, César M. Durán

¿QUIEN ES JESUCRISTO?


"El les dijo: ¿y quién creen ustedes que soy?
¡Tú eres el Cristo, el Mesías, el Hijo del Dios viviente"!
Mateo 16:15-16

A través de la historia, se le ha definido de muchas maneras: el gran Maestro, el líder más grande, el más grande revolucionario, el profeta...etc. Para el mundo cristiano Jesucristo es el Hijo de Dios, el Mesías, el Salvador de la raza humana, es Dios hecho hombre. Pedro asegura dos cosas cuando Jesús le pregunta quién es él. Pedro dice: "tú eres el Cristo..." Cristo significa ungido, es la traducción hebrea de la palabra Mesías. Los sacerdotes, los profetas y los reyes eran ungidos y consagrados para ejercer sus oficios.Jesús el Mesías toma en sí mismo estos tres oficios, el ser el único mediador entre Dios y los Hombres (1 Timoteo 2:5-6) lo posiciona como sacerdote (representante de los hombres frente a Dios) y profeta (representante de Dios ante los hombres). Respecto al oficio de rey, la Biblia declara que él es el Rey de Reyes (Apocalipsis 19:16). Por lo tanto el Mesías que los Judíos esperaban para establecer el reino eterno de Dios, ¡ya vino!.
El Hijo de Dios : Con esta afirmación Pedro está declarando que Jesús es el único hijo de Dios, engendrado directamente por él (por medio del Espíritu Santo) en la virgen María, por lo tanto está reconociendo la divinidad de Jesús. Es decir Jesucristo además de ser el ungido de Dios, el Mesías, es el mismo Dios encarnado, el Unigénito del Padre. Entonces cobran un gran sentido las palabras del apóstol Juan.
Dios nos amó tanto, a ti y a mi, que envió a su único hijo al mundo (a Jesús), a morir en la cruz, para que todos los que creen en El sean salvos de ser condenados eternamente por sus pecados y tengan vida eterna. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. (Juan 3:16)
Ahora te pregunto a ti: ¿Quién dices tú que es Jesucristo?. En estos momentos tú tienes que tomar una importante decisión respecto a Jesucristo, y tienes dos opciones:
a) Creer que Jesucristo es simplemente un hombre que inventó una mentira (y estuvo dispuesto a morir cruelmente por su mentira) y jamás resucitó, o
b) Creer en tu corazón que Jesús es el Hijo de Dios que te ofrece gratuitamente la salvación y la vida eterna

“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 14:6

Pag. Pastoral AMOR PLATONICO 3


En los artículos anteriores hablamos de las primeras tres partes del libro del Cantar de los cantares; un poema de amor escrito por el rey Salomón, quien estaba enamorado de Abisag, sunamita, quien fue llevada al rey David en su vejez, para que abrigara sus pies, y le sirviera, pero él nunca la conoció. Ella fue su musa de inspiración.
El amor de Salomón por la sunamita, es la historia de un amor platónico, idealizado, que jamás pudo concretarse, y terminó siendo un amor frustrado. Salomón jamás pudo tomarla por su esposa, porque a pesar de estar enamorado de ella, él mismo “se puso la soga al cuello”, al enojarse con su hermano y mandarlo matar, por pedirle a Betsabé, madre de Salomón, que intercediera por él y pidiera la mano de la sunamita, para que fuera su mujer. Así fue como él, quedó enlazado con los dichos de su boca, y se cerró para siempre la posibilidad de tomarla por su mujer. Pero ella continuó siendo en sus sueños, la mujer idealizada, perfecta, inalcanzable y prohibida. De modo que podemos comprender la razón por lo cual tuvo tantas mujeres; y su dicho: “mujer virtuosa ¿Quién la hallará?”. Salomón tuvo 700 esposas y 300 concubinas, y jamás pudo encontrar en ninguna de ellas, la mujer que él había idealizado en Abisag.

A la primer escena de esta historia, la titulé: “EL AMOR CULTIVADO” (1:1-2:7); en ella se resalta el amor que se cultiva, alimenta y fortalece, con palabras bonitas, suaves y románticas. Ella es única para él, y él es único y señalado entre diez mil, para ella. Y termina con el conjuro, que nos manda a no despertar el amor, que es un lindo sueño, ni hacernos del rogar hasta que queramos.

El segundo episodio fue: “UN AMOR DESCUIDADO”. (2:8-3:5) En donde la sunamita reconoce: “Me pusieron a guardar las viñas y mi viña que era mía no guardé” (1:6). Y el consejo: “Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas que echan a perder las viñas” (2:15). Pues son esos pequeños detalles y descuidos, los que echan a perder el romance y la armonía familiar.
La tercer escena, yo la llamé: “EL AMOR PERDIDO” (3:6-5:8). Inicia hablando del cortejo de bodas de Salomón, y alaba a su amada (Cap.4), mientras realiza su viaje. Cuando llega al aposento, ella está dormida, y aunque su corazón está velando, no tiene ganas de despertarse y atender a la voz de su amado; al contrario le replica. El amado la desea tanto, intenta convencerla de que le abra la puerta, pero todo es inútil; ella se conmueve al verlo meter la mano por la ventanilla. Y cuando al fin, se decide atenderlo, ya era demasiado tarde. Lamentablemente, ella sale a buscarlo, pero ya no lo encuentra; lo llama, pero ahora ya no hay respuesta.
“EL AMOR AÑORADO”, es la última escena. En el cual encontramos a la amada conjurando a las doncellas de Jerusalén, para que si encuentran a su amado, le digan que ella está enferma de amor. Lo que despierta la curiosidad de todas las doncellas, y preguntan: ¿Qué es tú amado más que otro amado, que así nos conjuras?; y es entonces cuando ella comienza a alabar y a describir a su amado, el cual es, dice ella: “blanco y rubio, señalado entre diez mil. Su cabeza como oro finísimo; sus cabellos, sus ojos, sus mejillas, sus labios, sus manos, su cuerpo, sus piernas, su aspecto, su paladar, dulcísimo, y todo él codiciable” (5:10-16). Esta descripción despierta la curiosidad y codicia de todas las mujeres, las cuales responden: “¿A dónde se ha ido tu amado, oh la más hermosa de todas las mujeres? ¿A dónde se apartó tu amado, y lo buscaremos contigo?” (6:1). El problema es que, a pesar de que ella reclama los derechos sobre él, diciendo: “Yo soy de mi amado, y mi amado es mío” (6:3); es demasiado tarde; pues para entonces, Salomón, ha buscado en muchas otras mujeres, la mujer virtuosa y perfecta, que él mismo había idealizado; y que era imposible encontrar: “sesenta son las reinas y ochenta las concubinas, y las doncellas sin número; más una es la paloma mía…” (6:8-9). Y a pesar de que ella fue el amor de su vida, un amor platónico e idealizado; era también, por causa de sus mismas palabras, un amor prohibido. Amor que marcó su vida, amor que jamás logró olvidar, y que ninguna otra pudo reemplazar. Amor al cual tiene que renunciar, a pesar de que ella lo añora y le ruega que regrese; y a cuyos brazos él anhela regresar (7:10-8:3). Este cuarto episodio termina también con el mismo conjuro: “No despertéis ni hagáis velar el amor, hasta que quiera” (8:4)

CONCLUSION.
¿Qué aprendemos de este libro? Primeramente a entender que el amor que perdura es aquel que se cultiva con palabras de amor, admiración, respeto y reconocimiento; hasta el punto de que ese enamoramiento se convierta en un dulce sueño, del cual no debemos despertar, y cuando se nos da, no lo debemos rechazar. Algo triste de aprender en esta historia, es el saber que fueron los mismos dichos de Salomón, aquellos que enamoraron, y conquistaron el corazón de la sunamita, los mismos que en un momento de celos, los cuales, según sus mismas palabras: “duros como el sepulcro los celos” (8:6); los que mataron su ilusión y su esperanza; pues lo ataron e impidieron que aquel que pudo ser un maravilloso amor, se convirtiera en un amor prohibido, culposo y tormentoso. Razón por lo cual, en múltiples ocasiones, repite Salomón: “la vida y la muerte están en poder de la lengua”; y nos amonesta a cuidarnos de quedar enlazados con los dichos de nuestra boca.

tra enseñanza que debemos aprender, es a cuidarnos de idealizar a la pareja virtuosa y/o perfecta; porque hará estragos en nuestra imperfecta vida y en nuestras relaciones. Recordemos que todos los imperfectos seres humanos, solamente podremos ser justificados por el manto de amor, que es el único capaz de cubrir nuestros múltiples y enormes errores.Y por último, la mejor enseñanza de este libro, es aprender el poder del amor, el cual es capaz de trascender y superar todas las adversidades. Salomón lo describe como “más fuerte que la misma muerte”; y dice que es como un gran fuego, al cual, ni las muchas aguas podrán apagar, ni lo ahogarán los ríos (8:7). Y es que su experiencia fue que jamás pudieron apagar la llama de aquel amor. Salomón jamás dejó de amar a la sunamita, y la sunamita jamás dejó de amarlo. ¡WOW! Esta es la maravillosa historia de un gran amor, amor eterno, que nada ni nadie pudo lograr extinguir.
Este si que es un amor capaz de todo, aun de renunciar a lo que más amas y deseas, con tal de proteger y no hacer daño, a quien amas tanto. Salomón tenía una viña maravillosa en la cual había conocido al amor de su vida, y en ella había pasado los momentos más felices; y se la regaló a ella, para que fuese su pensión y sostenimiento. Salomón la rentaba a sus guardias; cada uno de ellos debía pagarle mil monedas de plata por su fruto (8:11). Pero a ella, le interesaba él y no la viña, su compañía y no su pensión, y le dijo: “Mi viña, que es mía, está delante de mí; las mil serán tuyas, oh Salomón, y doscientas para los que guardan su fruto. Oh, tú que habitas en los huertos, los compañeros escuchan tu voz; házmela oír. Apresúrate, amado mío, y sé semejante al corzo, o al cervatillo, sobre las montañas de los aromas.” (8:12-14). Con estas palabras termina el libro de Cantares. ¡WOW! ¡El amor! ¡El amor! Capaz de darlo todo y darse a sí mismo, hasta la misma muerte por quien amas. Dios nos permita ser capaces de amar con ese amor eterno que solo El puede perfeccionar en nosotros.

Pbro. Miguel De León Flores

QUE LOS MUERTOS ENTIERREN A SUS MUERTOS


Mateo 8:22
DEJA QUE LOS MUERTOS ENTIERREN A LOS MUERTOS

“Dios no es dios de muertos, sino de vivos” Mateo 22:32

INTRODUCCION
En la semana de fin de octubre y principios de noviembre, el mundo celebra la semana de las tinieblas, de las brujas, de los muertos, y la misma adoración a la muerte y a Satanás. Gran parte de nuestra cultura es el resultado de la fusión del mensaje de los misioneros que llegaron a América para evangelizar a los indígenas, con la cultura prehispánica, que está saturada de la adoración a los dioses paganos y a la muerte. En el sur, festejan el día de los muertos, y aquí, por la influencia de Norte América, la cual fue afectada por la cultura de los países nórdicos, se celebra el Halloween. Ambos festivales tiene un fin común, la adoración al dios de las tinieblas. Y en este artículo, quisiera compartir contigo acerca de este tema:

NUESTRO DIOS NO ES DIOS DE MUERTOS SINO DE VIVOS Mateo 22:32
Nuestro Dios es el autor de la vida. El es quien sopló aliento de vida al hombre. Dios es quien lo creó para que viviera para siempre. De Dios emana la vida y por lo tanto El es el único que tiene derecho de volverla a tomar, porque a El le pertenece.
La Biblia nos dice que Jesús es el camino, y la verdad y la vida. (Juan 14:6) y que vino para que tengamos vida, y vida en abundancia (Juan 10:10) y que el diablo, es “El ladrón que viene para robar y matar y destruir”.
De manera que el que ama y respeta la vida, ama y respeta al autor de la vida; mientras que aquel que celebra la muerte está reverenciando al autor de la muerte.
Dios creó al hombre para que viviera para siempre, pero cuando Satanás engañó al hombre y éste desobedeció a Dios, la muerte entró a la tierra; por lo que Dios estableció que: “...La paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna...” (Rom.6:23).

SATANAS ES EL AUTOR DE LA MUERTE
El origen de la muerte. Por la desobediencia del hombre entró la muerte; y fue Satanás quien se enseñoreó de ella; de manera que fue a través del temor a la muerte que los hombres quedaron bajo servidumbre. Y desde la antigüedad tenemos datos históricos de todas las formas en que el hombre expresó su temor, reverencia y más tarde, adoración a la muerte. Doctrina satánica que en los últimos días nuevamente se está poniendo de moda. La adoración a “La santísima muerte”.
Entre las costumbres paganas con relación a los muertos, encontramos un sin fin de costumbres: Desde el deseo de inmortalizarlos, como lo hacían los egipcios, al embalsamarlos y convertirlos en dioses, los cuales eran adorados, para que desde el “mas allá” pudieran enviar a la tierra su bendición; pues si los hacías enfadar, desatarían plagas, granizo, tempestades, desgracias, etc.
Todas estas costumbres paganas, en su presentación original de cada cultura, tienen un origen y fin común: El temor lleva al hombre a adorar, engrandecer y rendir tributo a lo que teme.
En algunas culturas de África, los familiares se cortan un dedo por cada familiar que pierde la vida. Otros se hacen una cortadura en la piel. Otros les llevan alimentos. Nuestros indígenas hacían un altar a los muertos para llevarles ofrendas e invocar sus nombres. Pero, ¿sabes que es lo que la Biblia dice al respecto?
“Cuando entres a la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás a hacer según las abominaciones de aquellas naciones. No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos” (Dt.18:9-11). Nuestra cultura enseña a levantar un altar a los muertos, a platicar con ellos, a pedirles favores, a esperar que desde “allá” nos bendigan, pero ¿Sabes qué? Eso es abominación para con Jehová nuestro Dios.
La Biblia nos dice: “No comeréis cosa alguna con sangre, no seréis agoreros, ni adivinos. No haréis tonsura (Rapar) en vuestras cabezas, ni dañaréis la punta de vuestra barba, y no haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal alguna. Yo Jehová” (Lv.19:26-28).

LOS MUERTOS PROFANAN LO SANTO
“Jehová dijo a Moisés: Habla a los sacerdotes, hijos de Aarón, y diles que no se contaminen por un muerto en sus pueblos…. No se contaminará como cualquier hombre de su pueblo, haciéndose inmundo…Santos serán a su Dios, y no profanarán el nombre de su Dios, porque las ofrendas encendidas para Jehová y el pan de su Dios ofrecen; por tanto, serán santos.” Lv. 21:1-6
Si te das cuenta, un muerto contamina y profana un lugar santo, y a una persona santa; por lo que Dios prohíbe a los sacerdotes, que deben ser santos, contaminarse y hacerse inmundos por causa de algún muerto.
Cuando Josías limpió toda Judea de la idolatría, dice la Biblia que: “Profanó el rey los lugares altos que estaban delante de Jerusalén…los cuales Salomón había edificado a Astoret… a Quemos, ídolo abominable…y quebró las estatuas, y derribó las imágenes… y viendo los sepulcros que estaban allí en el monte, envió y sacó los huesos de los sepulcros, y los quemó sobre el altar para contaminarlo, conforme a la palabra de Jehová…” (2 Rey 23:13-16). Josías profanó los lugares de idolatría y los altares paganos, con huesos de muertos.
Ahora, ¿Qué dice Jesús acerca de los sepulcros? “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia” Mateo 23:27

¿PORQUE DIOS PROHIBE EL CONTACTO CON LOS MUERTOS?

Porque el autor de la muerte es Satanás. Quien desde la antigüedad, su tarea ha sido la de robar, matar y destruir. El autor de los homicidios, los asesinatos, las enfermedades, el dolor y la muerte, no es Dios, sino Satanás; y Dios no quiere que sus hijos vivan bajo el temor a Satanás y/o a la muerte. Y la buena noticia que tenemos de Dios es la siguiente:

JESUS DERROTO A QUIEN TENIA EL IMPERIO DE LA MUERTE.

“Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, y librar a todos los que por el temor a la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre”. He.2:14-15
En la antigüedad quien tenía el imperio de la muerte era el diablo, y él mismo era quien tenía al ser humano sujeto a servidumbre. Pero Cristo para eso participo de carne y de sangre, para destruir a Satanás y quitarle su poder. Y ¿Sábes quien tiene ahora del poder e imperio de la muerte? Cristo.
En la isla de Patmos, Cristo le dice a Juan: “No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades”. (Ap.1:17-18)
Cristo ha vencido al diablo y a la muerte; y esta ya jamás volverá a enseñorearse de nosotros. Cristo es quien tiene en sus manos las llaves de la muerte y las llaves del infierno. Ya no es el diablo. Ya no tienes porque temer. Tu vida y tu muerte están en las manos de Cristo. Por ello, Jesús nos dice: “Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente.” (Jn.11:25-26).
Y el apóstol Pablo: dice “Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos ”. Rom.14:8. “Porque para mi el vivir es Cristo y el morir es una ganancia. Mas si el vivir en la carne resulta para mi en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor…” (Fil 1:21-23).

JESUS NOS DA UN MENSAJE DE BUENAS NOTICIAS Jn.14:1-6

Los hijos de Dios no celebramos la muerte, celebramos la vida y adoramos al autor de la vida que es nuestro Dios y a nuestro Señor Jesucristo. Acerca de la muerte sabemos que todos un día seremos llamados a Su presencia, pero tenemos la esperanza de que Cristo ha preparado un lugar para nosotros; y la única manera de poder llegar al Padre y al lugar eterno es a través del único camino, la única verdad y el único que puede darnos vida eterna:
Jesucristo.

Pbro. Miguel De León

Saturday, November 04, 2006

LA ENCINA SAGRADA


La adoración a la encina sagrada, tuvo su origen, en la antigüedad, en Babilonia.
Lugar en donde este árbol, fue considerado sagrado.
La leyenda antigua consideraba que la noche en que murió Nimrod (el primer poderoso que hubo sobre la tierra, y quien construyó la ciudad de Babel, e inició la construcción de la torre, que lleva el mismo nombre) murió, de un árbol, seco que estaba en el patio de su casa, brotó un retoño, el cual se convirtió en un árbol nuevo, al cual llamaron Tammuz (el retoño de Nimrod), el cual, según la leyenda, llegó a ser el dios del sol y de la vegetación.
Según esta mitología babilónica, la diosa Istar era su amante, pero le fue infiel. Pero el día que Tammuz murió, ella descendió a los mismos infiernos para resucitarlo, en el mes cuarto del calendario hebreo (solsticio de verano), por lo que ese fue el nombre del mes durante el tiempo después del exilio. En el culto a ese dios, la muerte y la resurrección de Tammuz simbolizaban la muerte anual de la vegetación, y su resurrección en la primavera. También representaban la muerte del sol, en el solsticio de invierno, y su resurrección a partir del siguiente día, hasta concluir en el solsticio de verano. Las fiestas se celebraban, primeramente con endechas, para recordar la muerte, y después con alegría, para celebrar la resurrección. Estas fiestas siempre terminaban en bacanales y asquerosas orgías.
Bien, pues el padre Abraham, por haber nacido y haberse criado en Babilonia, estaba familiarizado con este tipo de fiestas paganas e idolatría; pues así es como nos lo describe Jehová: "Vuestros padres habitaron antiguamente al otro lado del río, esto es Taré, padre de Abraham y de Nacor; y servían a dioses extraños" (Jos.24:2). Razón por la cual, cuando Dios llamó a Abraham, le mandó abandonar su tierra y su parentela, la cual comulgaba con el paganismo y la idolatría; con el propósito de hacer de él una nación grande y poderosa que le sirviera al único Dios verdadero. El problema fue que, a pesar de que Abraham y su familia salieron de la tierra de Babilonia, las costumbres paganas salieron con ellos. Pues vemos a Abraham, quien estaba acostumbrado a la idolatría babilónica, invocando a su Dios debajo de todo árbol frondoso; al cual conocía solamente como: EL-ELION (El Dios más alto) y como EL-SHADAI (El Dios sustentador; y/o Todopoderoso). Pues esa costumbre de adorar a "La encina sagrada", él la había aprendido allá en Babilonia. En el pasaje de Gn12:6-7 se ha traducido en las versiones modernas: "el valle de More", pero las versiones antiguas traducen: El roble alto de More. Y "More" significa: Maestro. Por lo que los antiguos acostumbraban ir a un árbol a invocar a sus dioses y consultarlos. Esa costumbre pagana siguió a Abraham durante su peregrinar por la tierra de Canaán, de manera que buscaba una encina para levantar un altar y comunicarse con Dios (Gn.13:18; 18:1); ¿Y cuando llegaba a algún lugar desértico…? Bueno, pues allí "… plantó Abraham un árbol tamarisco en Beerseba, e invocó allí el nombre de Jehová Dios eterno." (Gn.21:33). Recordemos que con el nombre de Jehová, fue a Moisés a quien por primera vez se reveló; pero para los patriarcas, nuestro Dios, solamente era el Dios Altísimo, o el Poderosísimo; más alto y poderoso que todos los demás dioses.
Esa costumbre pagana e idolátrica de buscar a Dios debajo de todo árbol frondoso, continuó siendo una tradición de la familia de Abraham. Recordemos que su hijo Isaac se casó con una hija de Nacor, hermano de Abraham, el cual era idólatra (Gen. 24:47). Y el nieto Jacob, se casó con una nieta de Nacor, hija de Labán, a quien Raquel le robó sus dioses. Y esa costumbre de adorar, consultar y encomendarse a la protección de una encina, siguió a la familia de Abraham, pues cuando murió Débora, ama de Rebeca, Jacob la sepultó debajo de una encina que esta en Betel, la cual llamó: la encina del llanto (Gn. 35:8). Y es que la idolatría, las tradiciones y las costumbres paganas son demasiado difíciles de desarraigar; de manera que Dios tardó varias generaciones para poder hacer entender a su pueblo que El es un Dios celoso, y que si queremos sus bendiciones nos es necesario romper con todo aquello que El aborrece.
Cuando Dios liberó a su pueblo de la esclavitud de Egipto, el primer mandamiento que les dio, fue el de alejarse de la idolatría, y de toda práctica pagana, que pudiera apartarlos de la adoración al Dios verdadero:
"Cuando Jehová tu Dios haya destruido delante de ti las naciones a donde tu vas… guárdate… no preguntes acerca de sus dioses, diciendo: De la manera que servían aquellas naciones a sus dioses yo también les serviré. No harás así a Jehová tu Dios; porque toda cosa abominable que Jehová aborrece, hicieron ellos a sus dioses; pues aun a sus hijos y sus hijas quemaban en el fuego a sus dioses…" (Dt.12:29.32).
Sin embargo, fue tan fuerte la influencia de las naciones paganas vecinas, que a menudo el pueblo de Israel adoptó aquellas costumbres y tuvo que sufrir las consecuencias de su desobediencia; a pesar de haberles advertido: "Cuando entres a la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás a hacer según las abominaciones de aquellas naciones. No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas…" (Dt.18:9-13). Sin embargo, el pueblo abrazó la idolatría, y volvió a revivir la adoración a la encina sagrada y a todo árbol frondoso, a pesar de la prohibición de: "No plantarás ningún árbol para Asera cerca del altar de Jehová tu Dios" (Dt.16:21). Pero el pueblo abandonó a Dios y sus mandamientos "porque ellos también se edificaron lugares altos, estatuas, e imágenes de Asera, en todo collado alto y debajo de todo árbol frondoso" (1Rey 14:23). Pecados, tradiciones y costumbres paganas que fácilmente arrastran a los hijos de Dios a practicar cosas semejantes, mostrándolas como fiestas inofensivas; en las cuales, el mismo Salomón, con toda su sabiduría se vio envuelto; y fue la razón por lo cual encendió la ira de Dios (1Rey.11:5-8). El colmo llegó cuando los reyes de Israel, plantaron árboles para Asera, aun en el mismo altar de Dios (2 Cro. 33:2-10). Lo cual fue reprendido por los profetas: "Entonces os avergonzarán las encinas que amasteis, y os afrentarán los huertos que escogisteis" (Is.1:29-30); y fue la causa por la cual Dios los destruyó, pues "sobre las cimas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de las encinas, álamos y olmos que tuvieren buena sombra; por tanto…" (Os.4:13).
Bien, esta práctica no solo llegó de Babilonia a Canaán, sino que llegó a Europa; y es allí en los países nórdicos, adoradores de Odín, dios de la muerte y las matanzas, que representaron a su dios con una encina sagrada a la cual rendían adoración. Y como el nacimiento de Odín, lo mismo que Tammuz, Bacco, Isis y los demás dioses paganos, coincidía con el nacimiento del sol (solsticio de invierno); los misioneros católicos, al llegar a esas tierras, escogieron la misma fecha y las mismas tradiciones (sincretismo), costumbres y fiestas paganas y abominables a Jehová, para evangelizar los países nórdicos siendo el único cambio en la vida de los "evangelizados", que la fiesta que anteriormente celebraban con una encina, en su adoración a Odín; ahora podrían seguir practicándola, solo que la celebrarían con un pino, en honor del Cristo Rey.
Así es como la adoración a la encina sagrada, ha logrado sobrevivir hasta nuestros días.

Pbro. Miguel De León Flores


Vida en pareja VERDADERAMENTE ENAMORADOS



Algunas parejas se comprometen y llegan al matrimonio, sin ni siquiera estar totalmente seguros de que están realmente enamorados. Muchos lo hacen respondiendo a una gran atracción física, ésto, principalmente en el caso de los hombres. Otros, porque simpatizan muy bien y piensan que están enamorados. "Hay química", como dicen, pero en la convivencia se dan cuenta de que las cosas no eran como pensaban. Hay muchas parejas que no están totalmente seguras de sus sentimientos y también hay muchas que están equivocadas en cuanto a éstos.
Estamos muy poco preparados para el amor y el matrimonio.
Actualmente la palabra amor es usada descuidadamente. Si una pareja que se acaba de conocer en una fiesta, con unas copas de más se va a un hotel y fornica, se le dice "hicieron el amor". Pero ¿dónde estaba el amor ahí?, por supuesto que no había amor. Amor es una palabra sagrada, Dios es amor decimos, ¿cómo vamos a usar esa palabra para nombrar al pecado de fornicación?. Amor es una palabra muy mal entendida por el mundo en estos días.
Como cristianos tenemos que saber el verdadero significado del amor en la pareja, porque no vamos al matrimonio con la idea que el mundo tiene: "si no resulta nos divorciamos". No, para nosotros el matrimonio es para toda la vida y las promesas que se hacen frente al altar, delante de Dios, tienen que ser auténticas. Por eso, antes de pensar en la boda, la pareja tiene que asegurarse que estén verdaderamente enamorados. ¿Cómo saberlo? Aquí presentamos algunas pautas para saber si estás realmente enamorado(a)
Aceptas a tu pareja totalmente, tal como es...No te puedes casar si estás pensando cambiar a tu pareja. Si hay algo que no te gusta de tu pareja y piensas que después de casados vas a hacer que cambie, estás en un error. Esto será motivo de disgustos, discusiones y frustración. Si estás relamente enamorado(a), no te interesa cambiar nada en ella.
Estás dispuesto(a) a darte por entero...Tu principal deseo es hacer feliz a tu pareja por sobre tus propios deseos. En un matrimonio en donde uno de los cónyuges o ambos, solo buscan su propia satisfacción personal, las cosas nunca van bien.
Verdaderamente comprendes a tu pareja...Cuando tu capacidad de comprensión, te lleva a "adivinar" lo que tu pareja piensa o siente, es que has aprendido a comprenderla y a ponerte en su lugar, en cualquier circunstancia. Entonces sabrás usar la regla de oro con ella y ésto equivale a armonía en el matrimonio.
Aceptas y asumes tu responsabilidad dentro del matrimonio...Esto es aceptar los roles propios y asumirlos, no por obligación, sino con gusto. Los dos tienen la responsabilidad de entregarse plenamente el uno al otro.
El placer de la compañía...Cuando se está realmente enamorado, se disfruta la compañía de la pareja. Pueden estar juntos sin aburrirse. Sienten deseos de compartirlo todo, desde un atardecer romántico hasta una salida a comprar en el super, estando juntos, todo lo disfrutan.
Respeto mutuo...Aun si hay diferencia de opiniones o si alguno hizo enojar al otro, existe el respeto. Nunca hay palabras ofensivas hacia el otro, ni insultos, ni intención de herir a la pareja, solo porque no están de acuerdo en alguna cosa.
Actitud protectora...Cuando estás verdaderamente enamorado(a), sientes deseos de proteger a tu pareja de todo dolor, tristeza, daño, sufrimiento, etc. Tampoco tú serías causante de algún daño hacia tu pareja, como el sarcasmo, la crítica mal intencionada, la ironía. Vas a estar siempre levantando su ánimo, nunca harás nada que vaya en detrimento de su autoestima.
Agradarse el uno al otro...Cuando una pareja se ama de verdad, siempre tratan de agradarse, de complacer al otro. Cada quien es feliz con lo que agrada al otro. Tienen atenciones para su pareja que saben que la van a complacer.
Demuestras confianza...Los celos pueden ser halagadores hasta cierto punto, pero cuando se exceden, son un arma mortal. Provocan tristeza, ira, frustración. Nunca debes de someter a interrogatorio a tu pareja si llega un poco tarde. Deben tener una comunicación sana y aclarar lo que haya que aclarar, de una manera madura y controlada.
Todo lo aquí expuesto, no es difícil de llevar a cabo si se está verdaderamente enamorado. Si te parece difícil y te piensas casar...piénsalo más.

"El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta"
1 Corintios 13:4-7

Angélica García Sch.

Sen da Joven CELULAR


En estos días el teléfono celular se ha convertido en algo imprescindible, irremplazable e inseparable. Hay quienes no pueden salir sin él, ¡no se pueden separar de él ni para dormir!. Es verdaderamente un fenómeno esto de los celulares, ¿por qué se han vuelto tan indispensables, si antes de que existieran no hacían falta alguna?. Ahora, vas al cine y no falta un celular que suene a la hora de más suspenso de la película. Hasta en la iglesia de repente suena un ding dong dang de un celular, y un hermano o hermana sale sigilosa y rápidamente a contestarlo. Puedes instalar diferentes sonidos a tu celular, desde canciones de moda, hasta frases jocosas con acentos muy pintorescos.
Todos cuidan a su celular como antes los señores cuidaban su reloj de bolsillo. A veces nada más lo toman en sus manos para acariciarlo. Les compran adornitos, fundas, colguijes, etc. ¡Ay de que se les llegue a perder!. No puede existir situación más angustiante. La "víctima" recorre todos los lugares donde anduvo, le pregunta a todos sus amigos, va de acá para allá, buscando su preciado celular. ¡Su memoria está allí en el celular!. Se ha quedado con la mente en blanco...
¿Te identificas con todo ésto?
¿Eres de los que no puede vivir sin su celular?...Siendo un joven cristiano, te invito a que te hagas estas preguntas:
¿Trato a mi Biblia como trato a mi celular?
¿La llevo a todos lados, así como llevo mi celular?
¿Si la pierdo, la busco y pregunto a todos como cuando se me pierde el celular?
¿La reviso varias veces al día, para ver qué me dice Dios, así como reviso mi celular para ver si tengo mensajes?
¿La considero un super regalo para un amigo, así como considero que lo es un celular?
¿La llevo cuando viajo, así como no puedo prescindir de mi celular?
¿La uso en caso de emergencia?
¿Dónde está mi Biblia en estos momentos
y...dónde mi celular?
A diferencia del celular, no tenemos que preocuparnos porque se descargue nuestra Biblia, ni porque no entren los mensajes, ni porque esté fuera de área...Dios la mantiene actualizada todo el tiempo y con carga eterna. Es más, ¡ya pagó la cuenta por anticipado!

"Toda la Escritura es inspirada por Dios,
y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia" 2 Timoteo 3:16

Angélica García Sch.

Pag. de Eva MUJER RESPETA A TU MARIDO


Ser abnegada, obediente y amar a Dios es muy importante. Sé que estas palabras al principio para ti, pueden sonar huecas y tontas, como me sucedió a mí, pues no iban con mi forma de pensar y creía que estaban fuera de tiempo.
Pero pensar que la Biblia no debe tomarse en cuenta en esta época, pues los tiempos cambian, es un error. La Biblia, será siempre una inspiración para toda alma, la verdad de la vida, está en ella.
En la actualidad, en el mundo occidental, muchas de las mujeres son independientes, libres en su manera de pensar, nada las detiene. Ahora existen muchas oportunidades para ellas, y cada día tienen más ascensos en el campo laboral; y eso no es malo, solo cuando nos alejamos de los mandatos de Dios empiezan los problemas. Yo ya lo aprendí.
Cuando la mujer toma una fuerza descomunal y siente que ella es la cabeza de la familia y del matrimonio, y que el hombre esta ahí, para ayudarla en igualdad de derechos, en todo, incluyendo los quehaceres que son propios de una mujer (y no que sea malo), empezamos a perder la idea, de lo que es la estructura fundamental de un hogar. Al cambiar los papeles que desarrollan los principales pilares de la casa, descomponemos esto tan sagrado denominado la familia. Los hijos crecen con ideas falsas y cuando tengan su propia familia establecerán un programa igual o similar, al que vivieron en su casa, y no al establecido por Dios, en la Biblia.
El papel que le corresponde al hombre es el de ser el principal portador, no solo de lo económico sino de seguridad y carácter; pero en especial, tiene la responsabilidad de enseñar a sus hijos el camino a Dios, apoyado por la mujer.
Sobre la mujer caen muchas responsabilidades, debe atender al esposo, los niños y la casa, y debe ser tierna, amorosa, íntegra, entregada.
El corazón de una familia, está en manos de la mujer, necesita entregarse en cuerpo y alma, y ser guiada por Dios, pues sino su labor será incompleta, y a veces sin sentido; sin Dios no hay un fundamento sólido y firme para enfrentar la vida.
Es importante que las mujeres enseñemos a nuestroS hijos, a orar. La oración, es el mejor recurso que tenemos, para que se abran las brechas para un buen futuro, el que Dios quiere. En El, podemos depositar toda nuestra confianza, El no se equivoca.
Hemos crecido en una sociedad, en la que cada día nos quieren inculcar la independencia femenina, pero cuando Dios nos da una familia, necesitamos recibirla de corazón y aceptar que ahora nuestra responsabilidad para con ella, es más grande que cualquier profesión o título ostentoso. Sí, tener una familia es una gran responsabilidad, que se debe llevar con amor, para el beneficio de todos los miembros.
Por eso, mujeres, no caigan en el error de querer enseñorearse de sus maridos. Hay quienes presumen de mandar en su casa, y se burlan con la frase "yo llevo los pantalones", eso es orgullo y altivez. En ese plan, lo único que cosecharán serán reclamos, porque tu pareja se sentirá humillada, pues no le estás dando el lugar que le corresponde, el cual le fue otorgado por Dios.
Recuerda, tu marido es la cabeza de tu hogar (Efesios 5:23), y la mujer que es reconocida como buena, es la que teme a Jehová (Prov. 31: 30), por eso, obedece la Biblia, respeta a tu esposo (Efesios 5:33). Sé apacible, serena, sé esa mujer virtuosa de la cual nos habla el libro de Proverbios (31:10-31) y aún ante las adversidades, confía en Dios, y El te recompensará.
Así que, mujer aprende a respetar a tu marido y a guiar a tu familia con manos suaves pero firmes, en el temor de Dios.

Rocío Márquez de Meza

HUMOR SANTO








Mi cocina BOCADILLOS SORPRESA

Para que te luzcas con tus invitados en estas fiestas de fin de año, aquí te presentamos unas ideas muy originales para tus bocadillos.
El pan utilízalo para formar el cuerpo, puedes usar las aceitunas para los ojos, o bien formarlos con pedacitos de pan, jamón, mortadela o queso, los cuales también debes usar para formar los rasgos de la cara y el resto del cuerpo. Usa algunas verduritas para los detalles.
Diviértete, haciendo figuras comestibles como éstas.

Música para Dios ESPIRITU SANTO


EL ERA DIFERENTE



"Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros" Juan 15:18
El era un hombre diferente a los demás, no reaccionaba igual que los demás, tenía actitudes distintas a las de los demás. Mucha gente no entendía ésto y por eso lo criticaba. Algunos, inclusive, lo perseguían para encontrar en él una buena razón para condenarlo, lo hostigaban constantemente. Su nombre era Jesús, el hombre que cambiaría la historia de la humanidad, un hombre santo, el más santo de todos, el Hijo de Dios.
El hombre siempre juzga y critica lo que no entiende. El mundo se dibujó un patrón del ser humano y si alguien, hombre o mujer, se sale de este patrón, es juzgado, criticado y burlado. Algunos grandes genios, han sido tildados de locos. Los niños genios son vistos como un fenómeno. Igualmente, por el lado contrario, se menosprecia a los que no son muy inteligentes. Todo tiene que corresponder al patrón, ni de más, ni de menos. Pero para Dios no hay acepción de personas, todos fuimos creados a Su imagen y semejanza.
Los cristianos no correspondemos al patrón que el mundo ha trazado, sino al patrón que Dios trazó para nosotros. No tenemos por qué participar en las actividades que ellos consideran "normales", pero que sabemos son desagradables a Dios. Cuando hacemos ésto, nos estamos saliendo del patrón de Dios y estamos entrando en el patrón del mundo, o sea del diablo. Jesús era diferente, nosotros también debemos ser diferentes, a pesar de lo que diga la gente. No importa que nos critiquen y se burlen. Esto es un reto para quienes estudian o trabajan en un lugar en donde hay muchas personas, donde no faltan quienes tratan de "sonsacarlos" para que participen junto con ellos en cosas que están fuera de la voluntad de Dios.
Si nos decimos cristianos, tiene que notarse en nuestra conducta diaria. No basta con el hecho de ir a la iglesia los Domingos; no es eso lo que nos hace cristianos. La diferencia es lo que demuestra que somos cristianos. Nuestro testimonio habla más que mil palabras. Si un cristiano asiste a la iglesia el Domingo y el Lunes por la noche, acompaña a sus compañeros de trabajo a un bar, lo que hace es solamente aparentar ser un cristiano. Está teniendo solo una religión o una costumbre y no una convicción.
Seamos diferentes, con ese sello especial de santidad que proviene de tener a Jesús en nuestras vidas. No temamos ser diferentes, sino que sintámonos orgullosos de serlo. Exterioricemos nuestra condición de hijos de Dios, sin miedo a ser tildados de locos ni de ser menospreciados, ¡qué importa!. Seguimos los pasos de Jesús, él soportó todo eso, también nosotros debemos soportarlo.

"Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas"
Efesios 5:11

Angélica García Sch.

HAMBRE


Hoy, quiero hablarles del hambre. No del que sentimos cuando por algún motivo pasamos por alto nuestra comida diaria. Del hambre en nuestra casa, pero no de la casa que nos cobija del frío y nos cubre del calor, donde tenemos un refrigerador con alimentos a nuestra disposición. Del hambre de nuestra familia, pero no estoy hablando de nuestros padres e hijos, a los que saludamos diariamente, ni de los tíos, abuelos y amigos, que se visitan con frecuencia. Hablemos del hambre en el mundo, que es nuestra casa, nuestra familia. En el mundo hay un billón de personas que sufren de hambre y desnutrición.
Nuestro Creador nos ha dado una tierra que tiene suficientes recursos para producir bastante alimento para todos, pero todavía hay hambre. Muchísimas familias vive con un ingreso menor a un dólar diario, y las mujeres sufren para hacerlo rendir. El 70% de las personas que sufren de hambre son mujeres y niños. Seis millones de niños menores de 5 años, mueren cada año, según una revista de estadísticas que me prestaron.
Cuando escuchemos hablar del hambre, debemos dar gracias a Dios por todas las bendiciones que tenemos, pero también, deberíamos escuchar al que está tocando a nuestra puerta. Al forastero que emigra en busca de trabajo y no tiene documentos, al refugiado que huye de una guerra inútil, a la niña indígena que quiere ser doctora. Escuchemos a la madre que se quedó esperando a que su hija llegara del trabajo, al joven que pasó su niñez en los basureros, buscando que reciclar para venderlo, y así sacar algo para comer. A la madre joven que está muriendo de SIDA, y se preocupa por su hija desnutrida en un hospital. Y también a la madre preocupada por su hijo adolescente, enfermo y acostado en un pedazo de cartón, y a tantas mujeres afganas que salen en las noticias, ocultado su tristeza bajo un velo, mientras esperan una ración de arroz.
Por eso, cuando escuches esas voces, ponles atención, ellos están en nuestra casa, y aunque no los vemos, son parte de nuestra familia. No los puedes tocar, pero necesitan un abrazo, pues están sufriendo la aflicción del hambre.
Pídele a Dios que te dé hambre, pero hambre de orar por ellos. Así como lo hizo Jesucristo al Padre: "No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal "(Juan 17:15). Y El te responderá: "Estas cosas os he hablado para en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo" (Juan 16:33).

Sergio Arturo Ochoa Loera

"TE ALABEN, OH JEHOVÁ TUS OBRAS, Y TUS SANTOS TE BENDIGAN"


Con cada amanecer se inicia un nuevo día, dándonos la oportunidad de admirar y agradecer todo lo que de Dios proviene.
El tiempo transcurre velozmente, está por llegar el año 2007. Es bueno reflexionar como hemos administrado el año que está por terminar, porque cada segundo que se nos concede trae una nueva oportunidad de servir al Dios vivo y verdadero. Ninguna tarea es tan insignificante que no pueda ser de bendición cuando la realizamos con amor, porque El ha tenido un propósito al dotarnos de habilidades y talentos.
Estamos comprometidos a exaltar al Rey de reyes y Señor de señores porque solo El es digno de suprema alabanza, porque su grandeza es inescrutable; generación a generación debemos celebrar sus obras. En sus hechos maravillosos debemos meditar diariamente, proclamando a quienes nos rodean de su inmensa bondad, porque su clemencia y misericordia son constantes (Salmo 145: 3-8).
Bueno es Dios para con todos, porque a pesar del pecado en que está inmerso el mundo, nosotros somos testigos de como ha detenido su ira por amor de aquellos que han de creer en él. Sus hijos estamos a la expectativa del Gran Día cuando veremos cielos nuevos y tierra nueva. En ocasiones quisiéramos que fuese hoy, pero justo es Jehová en todos sus caminos y misericordioso en todas sus obras.
Sabemos que el tiempo más valioso de nuestra vida es el que ponemos a disposición de nuestro Salvador y Dueño de nuestras vidas, sea sirviendo en la Iglesia o a nuestro prójimo. No nos cansemos de hacer el bien cada día porque somos sal de la tierra y luz del mundo, por medio de Jesucristo.
Y como está casi por terminar este año 2006 les invitamos a unirse a nosotros en alabanza al Todopoderoso con un corazón comprometido diciendo: Padre Eterno, bendecimos tu santo nombre por la grandeza de tu amor y misericordia porque hasta aquí nos has ayudado. Permítenos servirte y adorarte todos los días que tus nos concedas sobre esta tierra, estando en espera del gran día cuando estaremos contigo en Tu reino.

Landy Q. de Ortiz

RENOVACION, UNA INVITACION A LA REFLEXION


Estamos llegando a diciembre y con ello, el año termina entre luces, alegría y nostalgia. Es entonces el momento de hacer una tregua con la computadora, el internet y los ciber-juegos, para llevar a cabo aquello que se planeó según tiempo y presupuesto.
Diciembre tiene su encanto, la fragancia de sus noches nos invitan a la reflexión de lo que vivimos durante el año, para darnos cuenta de lo que dejamos de lado; muchos trabajos inconclusos, que con el tiempo se han vuelto añejos. Hoy, hay algo por hacer y otras cosas por concluir, a pesar de que los días sean nublados y húmedos.
La atmósfera tiene un aroma distinto. Hay amor en todo lo que se toca y se dice, nos estimulan a los buenos deseos. Gozo, paz, el espíritu navideño nos empieza a contagiar, tenemos paciencia, benignidad y bondad con todos los que nos rodean, nos consolamos con una sonrisa de esas que alegran el día a cualquiera, somos más sensibles al sufrimiento humano.
¿Por qué tenemos que esperar a Diciembre para sentir los frutos del Espíritu Santo?
Será porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado y el principado sobre Su hombro; y se llamará Su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
(Isaías 9:6)
Bueno, se va otro año más y vendrá un período de completo relajamiento de la rutina y las actividades propias, después de tantos trabajos y desvelos, pues en la carrera desenfrenada del trabajo, por ver cumplidos nuestros sueños, ilusiones y propósitos, hemos trabajado mucho. Aunque a veces no hemos visto los logros de nuestro esfuerzo y nos sentimos estancados, pues al ser humano le es fácil, en un momento, hacer mil y un planes para todo el año, no obstante, el problema llega, al momento de realizarlos.
Recuerden al profeta Elías, el había tenido meses de intenso trabajo y de grandes éxitos, pero al comenzar una nueva etapa de su vida, tenía sueño, estaba agotado, deprimido y se sentía solo (1 Reyes 19: 4-5).
¿Cuántos de nosotros no nos hemos sentido así al terminar el año?
El Padre Celestial quiere que hagamos un alto para que tomemos un merecido descanso ¿Sabes por qué el Señor nos obliga a detenernos? Porque no sabemos descansar. Tan afanados estamos en los quehaceres, que a veces no actuamos con sensatez.
El quiere que veamos por donde vamos, que tomemos nuevas fuerzas para que podamos continuar nuestro camino, seguros hacia una dirección y meta definidas, quiere que nos renovemos constantemente, que nos superemos espiritualmente, que desarrollemos un carácter fuerte y sólido,
que seamos ejemplo, que dejemos huella con nuestra vida. Pero no debemos esperar a que llegue diciembre para meditar en lo estamos haciendo, ni tenemos que esperar a que den las doce campanadas, para hacer nuevos y mejores propósitos.
Mejor busquemos el rostro de Dios desde ahora y no permitamos que el desánimo, el estrés, la rutina o el pasar del tiempo apaguen nuestras buenas intenciones, hagamos la diferencia entre la vida que llevamos, y una vida lozana que amanece todas las mañanas. Seamos más justos, para que nuestra senda sea como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto, disfrutando de las bendiciones nuevas que vienen de lo alto, directamente del trono de Dios.
No se desanimen, vale la pena esperar, descansar y dedicar tiempo para estar con Dios. Escudriñemos las Escrituras, para que cada día, nos ayuden a enfrentar los desafíos que nos aguardan, y a crecer en la presencia y el conocimiento de Aquel que nos ama y espera en silencio. Los planes estratégicos vendrán por añadidura.

Martha Mercado

Pag. de la salud ALIMENTACION CONTRA LA DEPRESION


Los principales alimentos que nos ayudan a mejorar nuestro estado de ánimo son: frutas, verduras, pescados y lácteos. Los trastornos del apetito son una regla prácticamente en todas las depresiones y se pueden manifestar como disminución de la ingesta y/o alteración del patrón alimentario, lo que lleva a una pérdida de peso no planeada. Conviene vigilar, principalmente el déficit de nutrientes básicos específicos como falta de vitaminas B y C, Calcio, Hierro, Magnesio y Potasio y la desnutrición que son déficit habituales entre los que padecen Depresión.
ALIMENTOS BASICOS: se deben consumir a diario lácteos, de preferencia bajos en grasa para alimentar las reservas de calcio, además CARBOHIDRATOS en especial cereales integrales, legumbres, verduras, hortalizas y frutas secas, para garantizar la fibra, las vitaminas y los minerales. Aunque las proteínas son importantes y necesarias, no conviene abusar de las carnes rojas, optando mejor por el pescado para asegurar el aporte necesario de vitaminas y minerales, y si se toman antidepresivos hay que evitar las carnes procesadas y/o enlatadas, así como hígado de pollo, alcohol y quesos curados.
LLENATE DE VITAMINAS Una de las consecuencias de la depresión debida a la malnutrición, es la disminución de algunas vitaminas, sobre todo las del grupo B y C, por lo que se deben ingerir abundantes cereales integrales, legumbres, carne magra, pescados y huevo, ya que estos alimentos garantizan el aporte necesario de vitaminas B asi como hierro, potasio, magnesio y zinc. La vitamina C que necesitamos la obtenemos de las frutas y verduras frescas, principalmente de espárragos, brocolí, pimiento, col, melón, kiwi, naranja y guayaba.
EVITA INGERIR EXCITANTES COMO EL CAFE Y TE ASI COMO BEBIDAS ALCOHOLICAS.
LLENATE DE LA PALABRA DE DIOS Alimenta también tu alma, la Palabra de Dios. En cambio, es el mejor alimento para tu alma ya que tiene nutrientes especiales para tu mente y tus emociones y es lo único que por medio del Espíritu Santo te dará paz y gozo. "Porque son vida a los que las hallan y medicina a todo su cuerpo". Proverbios 4:22
SIGUE ESTOS PRINCIPIOS Y VENCERAS RAPIDAMENTE ESTE MAL


Dra. Eva Angelina González de Pope

Página de los niños PROMESAS

Para Sergio, esta Navidad sería diferente, esperaba muchos regalos. Su papá le había prometido un nintendo, su mamá, un juego y su tía Sara, dinero. ¡Cuánto anhelaba que llegara el día! Pero lamentablemente, no todos pudieron cumplir con sus promesas. A veces por más que quiera una persona hacer lo que dijo, no le es posible, y aunque es terrible que no nos cumplan, debemos considerar el deseo y el esfuerzo de la persona, pues muchas veces, no depende de ella, sino de las circunstancias de la vida.
Solo hay alguien, cuyas promesas siempre son un SI (2 Corintios 1:20). Porque El sí tiene el control de TODO, y ese es DIOS. Una palabra de El tiene el valor de una promesa, y Su Palabra, una vez pronunciada, es verdad. Dios mantiene Su Palabra, porque no es hijo de hombre para que mienta, ni para que se arrepienta (Num. 23:19). Y cuando El se tarda en cumplir algo, es con un propósito, o porque nosotros no estamos preparados para recibirlo.
Todo lo que dice la Biblia, se cumplirá. Dios dijo 300 veces en ella, que enviaría a Su Hijo a Salvarnos y lo cumplió, la salvación, es el mejor regalo que hemos recibido, por eso celebramos la Navidad. Otra de las muchas promesas que tiene, es la de que Cristo volverá por nosotros, hay 500 profecías escritas. ¿Estás listo? Créelo, pues El cumplirá.
Si deseas algo o tienes algunos proyectos, aunque alguien te haya prometido ayudarte, pídele a Dios, que El apoye esas promesas.


TEXTO BIBLICO: "Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará" Salmo 37

Marisa de Valle